El algodón proviene de una planta arbusto llamado algodonero. Sabemos que los antiguos egipcios ya lo cultivaban. El algodón crece en climas cálidos y húmedos. Sus frutos son las cápsulas, cada una con treinta semillas rodeada de abundantes fibras vellosas llamadas hilachas. Después de recoger las cápsulas, hay que separar el algodón de las semillas (de las que se obtiene el aceite) y de los trozos de corteza.
La semilla entera se usa fundamentalmente en la alimentación de vacas de leche de alta producción, donde su valor nutritivo es elevado. La semilla de algodón tiene la "única distinción..." de ser muy palatable, presentar una alta concentración de energía (NEl 2,27 Mcal/kgMS), tener un promedio de 17% de Grasa, un 25% de Proteína Cruda y fibra de alta digestibilidad (29% FDA),... difícilmente se encuentren estas características en un solo alimento.